21 de agosto de 2013

Yo invito

Este fin de semana largo que pasó estuve ausente, me desconecté de todos y de todo. Lo andaba necesitando, fue una decisión imperiosa e improvisada al mismo tiempo.. Aproveché para ir a cortarme el pelo. Sucedió que Oscar, mi jardinero y peluquero de toda la vida, me llamó el jueves por la noche para avisarme que tenía disponible una cuadrilla de pasantes que podían ayudarlo a cortarme el pelo y como lo hacían ad honorem, aproveché nomas. Hace instantes que llegué a casa, la verdad, me siento renovado, como si me hubiera quitado un gran peso de encima. Además, de muy buen humor porque encontré mi segunda vocación en la vida. (o visto como viene la cosa, un extra que voy a integrar en cualquier momento) y es la de convertirme en el mejor lavador de cabezas de las peluquerías que nunca jamás haya existido en la historia de los estilistas. Siento que nací para lavar cabezas, no tengo dudas de lo bien que lo haría, ya imagino sendas señoras copetudas entregadas al placer y la relajación del agua tibia deslizándose entre los pelos, rendidas al roce de mis yemas lubricadas con shampoo de algas que, uno a uno van punzando suavemente cada punto capilar despertando una corrida eléctrica que les eriza la piel de la nuca a los pezones…estremeciéndose por dentro, humedeciéndose en la intimidad de la fantasía y el deseo...      Pero por ahora mi amor incondicional es la escritura. La escritura entendida como la acción de contar algo que se quiere contar. Algo que se siente insaciable hasta que se comparte. Y por compartir les quería contar. Cuando regresé de la peluquería, encontré dos mensajes en el contestador que meritan la chochura al cuadrado que hoy me baña: El primero es que voy a estar en la feria del libro de septiembre. Personalmente pienso que los de la organización se han vuelto locos, pero bue... es problema de ellos, a mí ya me dieron el ok para presentar oficialmente Los Choripas en el marco de la feria, así que ahí estaré, firme, como rulo de estatua parando con el pecho los tomates... Así que vengan y traigan perejiles, Yo invito (la entrada es libre y gratuita).




¿chochura al cuadrado? Sí. Porque el segundo mensaje que tenía en el contestador era la confirmación de que también voy a estar en la feria del libro de La Rioja, dónde y, como si fuera poco, me va a presentar el reconocido historiador y escritor Mario Bravo Tedín. 



¿Qué más les puedo decir? No quiero decir más nada, reciban esta alegría.  


PD: Se agradece difundir. (Y si así no lo hicieran que Dios y la Patria se lo demanden, en la hoguera)